Camino medio

Me equivoco cuando estoy en lo cierto y me pierdo al encontrarte. Soy confuso y loco, soy paranóico y feliz. Siempre resulta que parezco ser el que no está tan contento, siempre parece que tal vez estoy mal, pero en realidad estoy sintiendo, en realidad estoy tratando de ser mejor.
Todos mi días se convierten en noches, todos mis segundos son sinónimo de libertad. En el medio de tanta gente que no tomo como tal, en el medio de un mundo de intereses y decisiones encontradas, intento seguir un camino en el que pueda ir solo, donde nadie salga herido y yo pueda hacer lo que tengo que hacer, insistir.

Todo

Lo divino y lo real, lo excelente y natural. Todo ese espíritu que corre por nuestras venas, todas esas almas con las que aprendemos a convivir, todo es un mundo de satisfacciones y todo es parte del Sol.
Cada segundo, cada partícula, cada deseo y cada canción. Cada una de las cosas que son cosas ayudan a crear el presente, es un poco de todo lo que hace un universo.
Por suerte mientras algunos sufren por pasados y otros se angustian por futuros los que queremos disfrutar le sonreimos al ahora, le damos la bienvenida a cada presente. De este modo el día va a poder ser feliz, es importante saber que éste es el camino a la libertad de ser.

Revoluciones confusas

Las revoluciones aminoran su marcha cuando dejamos que la cabeza deje de estar preocupada y atareada. Lo que nos ocupa tiempo nos ocupa vida y lo que nos ocupa vida nos ocupa corazón; tal vez sea por esto que es complicado decir las cosa de frente, tal vez sea por esto que las palabras salen más fácilmente con el alcohol. Son verdades ebrias, mentiras borrachas. Son sangre y lágrimas pero también luz (oscura pero luz al fin) y verdad.
Los nervios no se calman con nervios y la tranquilidad está quieta y esperándonos, está a la vuelta de una esquina confusa, cerca de la paz y de la espiritualidad. Es como si nuestra cabeza comandara un ejército de salvajes y el corazón siempre lo intentara frenar, es como cuando despertamos de tanto soñar despiertos y solo pensamos en volver a dormir.

Camino y destino de la mano

Lo que siento y quiero es lo que soy y transmito; mi fuerza y mi deseo, mi frente y mi cerebro. Tengo una cabeza dura y un corazón blando, tengo pensamientos y sentimientos. Agradezco que mi camino se haya cruzado con mi destino, que se hayan amigado y que ahora vayan de la mano. Esto me permite apuntar y dejar que el espíritu se muestre como lo que es, al mismo tiempo que la esencia se transforma en nuestro ser. Yo te sigo mientras sigo mi rumbo, yo confío y quiero despegar.

Mientras vivía

Me enseñaron a vivir mientras vivía, me enseñaron a aprender y aprendí.
Aprendí que un segundo dura mucho más que un segundo, aprendí que repetir no siempre es reiterar. Pude comprender que tenemos una cabeza a la cual entender, pude saber cuál es mi huella y qué aroma tiene mi destino. Tantas vidas que se viven y tanto tiempo que nunca se va, es por esto que mi vida tiene su propia vida, es por esto que insisto tanto en seguir.